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Supera la cuesta de enero de tu coche, ¿cómo ahorrar este mes en el mantenimiento de tu vehículo?

Supera la cuesta de enero de tu coche, ¿cómo ahorrar este mes en el mantenimiento de tu vehículo?

Comienza el año con la temida cuesta de enero, las subidas de impuestos en peajes, luz, agua, electricidad y gasolina. Sin embargo, no te preocupes, en el artículo de hoy te vamos a dar unas claves para que se te haga este mes más llevadero y superes la cuesta de enero de tu coche sin problemas. Y es que enero es un mes de locura y gastos por todos lados, no sólo están las rebajas, sino también Reyes, las correspondientes subidas de los impuestos, en definitiva, lo único que se hace es pagar y pagar. Y aunque parece mentira que la paga extraordinaria de Navidad (para el afortunado que la recibe) haya sido hace un par de semanas, no dura eternamente.

Cuesta de enero de tu coche, ideas para ahorrar

La clave para que no tengas problemas con la cuesta de enero de tu coche es tirar de ingenio y aprovechar cada céntimo el máximo posible. Por ejemplo, debes intentar ahorrar en todos los frentes, no sólo en cuanto a la reducción del consumo de combustible y la forma de conducir, sino buscar ofertas y aplicaciones para encontrar las gasolineras más baratas y realizar un mantenimiento que reduzca los costes económicos a corto y largo plazo.

Pero primero vayamos por partes, no es lo mismo el consumo y el gasto de un coche antiguo de más de 10 años, que otro recién comprado o que tenga menos de 5 años. Los coches viejos, y nos referimos a aquellos que superen la década, tienen más gastos que uno nuevo. No sólo por tener que pasar la ITV cada año, sino porque suelen tener más averías y en torno a un 10 % de estos vehículos se puede quedar tirado en cualquier momento si no se le hace un mantenimiento adecuado.

Una vez tenemos en cuenta este aspecto, es necesario recalcar que aunque el coche sea nuevo también requiere una revisión de vez en cuando. Eso sí, menos veces que un coche de mayor antigüedad.

Ahora que ya tenemos claro un aspecto fundamental como es la edad de los coches te vamos a dar unas ideas con las que ahorrar algo de dinero. Antes hemos hablado del tema del consumo, y es que conducir con marchas altas, sin pegar acelerones ni dar frenazos bruscos te ayudará reducir el consumo, en especial, a largo plazo.

Reduce el consumo

Para ello debes realizar las siguientes acciones:

  • Conducir manteniendo una velocidad que no supere las 2.000 revoluciones, si eres capaz de mantener tu coche entre 1.500 y 2.000 revoluciones tu cartera te lo agradecerá a fin de mes, y más este mes de enero.
  • Revisa la presión de las ruedas de tu coche. Un mal estado de las ruedas aumenta el consumo y las desgasta más fácilmente. O sea que la próxima vez que vayas a una gasolinera recuerda comprobar la presión. Una clave más, prueba en varias o en tu taller en caso de que puedas. Esto se debe a que los manómetros de las gasolineras sufren golpes y desgastes y es posible que midan con un margen de error elevado.
  • Si estás ante un atasco, en un semáforo o en una cola esperando por tus hijos, no lo dudes y apaga el motor. Hacer esto puede ayudar a reducir hasta 0,7 litros a la hora que consume tener el coche a ralentí.
  • Comprueba cuánto tiempo te lleva ir a tu lugar de destino favorito (casa y lugar de trabajo) y comprueba cuál es la ruta más corta mediante el uso de un GPS del móvil, o una aplicación del tráfico tipo Google Maps o similares. Si tienes que recorrer muchos kilómetros y hacer a diario una ruta seguro que ahorras mucho de esta forma.

Revisa todos los elementos clave del motor

Conocer el motor y cómo funciona tu coche es la mejor forma de asegurar que no falle. Para ello, te vamos a contar los elementos clave del motor y cuáles debes revisar para reducir el consumo.

  1. La batería es un elemento que debe estar de los primeros de tu lista a la hora de revisar. Si la batería falla, el resto del coche deja de funcionar por completo. Aunque muchos coches nuevos no permiten el acceso a la batería, si tienes la suerte de poder acceder a ella, revisa el líquido de la batería y recuerda que suelen durar en torno a unos 6-7 años, en función de su gasto y trato que la hayamos dado al coche. Otro consejo es prestar atención a la hora de encender tu vehículo. Si escuchas ruidos raros al encender o ves que tarda más de lo normal, es posible que tengas que cambiarla.
  2. Filtros. Los coches suelen tener cuatro clases: de aire, de aceite, de combustible y de partículas. Debes cambiar los filtros cuando toque, aunque mucha gente opta por cambiar todos en cada revisión. En todo caso y si quieres ahorrar, puedes elegir por comprarlos tú mismo y llevárselos a tu taller, en caso de que tengas confianza con ellos. Si quieres alargar un poco el cambio, puedes esperar unos cientos de kilómetros, eso sí, no te pases y cambia cuando toque. Normalmente, suele ser entre los 10.000 y los 15.000 kilómetros. ¡Recuerda, un poco, no mucho, si por ejemplo tienes que cambiar el aceite a los 10.000 puedes alargar hasta los 11.000, pero no mucho más!
  3. Con respecto a la batería, puede que el coche no encienda a consecuencia de los calentadores (en el caso de que sea diésel), la próxima vez que vayas a tu taller mecánico de confianza, dile que revisen estas bujías de calentamiento. Son baratas (menos de 16 euros cada una, aproximadamente) y así te aseguras que la batería no se fuerza y se desgaste.
  4. Frenos y amortiguadores. Estos elementos junto a las ruedas y la batería es la tríada de cosas que tienes que ver sí o sí cada vez que hagas una revisión. Para ahorrar combustible y dinero con estos elementos, los expertos recomiendan usar el freno motor para que se desgasten menos.
  5. Tubos de escape. Este elemento tiene como labor principal contaminar menos. Es posible que te penalice a la hora de pasar la ITV. Para mejorar sus niveles puedes optar por cambiar el combustible de vez en cuando, por ejemplo, si usas diésel normal, echa un depósito de gama superior para que limpie la carbonilla acumulada en el motor y el escape.
  6. Motor y correa de distribución. Anota en un papel la última vez que se hizo el cambio de la correa. Recuerda, que si se estropea este elemento puede romper el motor de tu coche.

Realiza un mantenimiento previo

No podemos dejar de repetir la importancia de realizar un mantenimiento previo. Y es que a poco que hagas, reducirás las averías y pagarás menos. Si tratas bien tu coche, revisas el motor de vez en cuando, cambias el aceite, y no expones el coche a comportamientos extraños que aumenten el consumo verás cómo pagas menos a final de mes.

¡Y recuerda, en AupaCar somos especialistas en mecánica rápida del automóvil, cambios de neumáticos y averías de todo tipo y estaremos encantados de revisar tu coche sin problemas!

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